martes, 25 de septiembre de 2012

¿Sabes qué significa delincuencia?


Por: Carlo Osores
Delincuencia
Se refiere a un conjunto de actos en contra de la ley, normalizados por la ley y merecedores del castigo por la sociedad en diferentes grados. Se podría definir también como una conducta por parte de una persona que no acata las normas que la sociedad ha impuesto.
Sin duda la delincuencia es uno de los temas que más preocupa en la sociedad de hoy, y mucho más en países de Latinoamérica donde gracias a estudios que se han proporcionado a 18 de países de este continente reveló que el 32% de personas encuestadas piensan y afirman que la delincuencia es el principal problema de todo Latinoamérica. Y esto contribuye también a la falta de seguridad.
Pero acercándonos a nuestro país, y mucho más a nuestra ciudad, nos podemos dar cuenta que la delincuencia, encerrando robos de gran magnitud y asaltos a mano armada, está impuesta en nuestra ciudad como una actividad cotidiana para quiénes la realizan. En los últimos años se han registrado los famosos ‘asaltos a mano armada’ donde el autor del delito causa la violencia o intimidación en la víctima mediante la utilización de armas, blanca o de fuego. Este tipo de asaltos se han hecho frecuentes en calles, tiendas (grandes o pequeñas), incluso en servicios de taxi, parques y servicios a domicilio. Suelen ser tan aleatorio y poco planificado que las mismas víctimas raras veces acceden sin reaccionar a este tipo de asaltos.


Pero lo aún más deficiente de este tipo de asaltos, que resultan ser factibles para los delincuentes, es que se están empezado a propiciar en jóvenes de 16 a 18 años. Llamados “Delincuentes juveniles” (la edad tope varía según el país y la naturaleza del delito). Pero ¿Por qué se desarrolla ese tipo de actitudes en jóvenes que aún cursan esa edad? Las explicaciones son muchas, y hasta ahora no se tiene ninguna hipótesis que trabaje de manera exacta.
Las explicaciones que asimilan este tipo de actitudes son:
·         La falta de trabajo, para los jóvenes que no poseen una condición económica para su educación.
·         La falta de educación.
·         Falta de cariño y atención, por lo que los mismos “delincuentes juveniles” necesitan que haya un interés por parte de sus padres.
·         Impulso familiar. Familias o solo miembros familiares, que carecen de base económica para satisfacer sus necesidades y que incitan al menor de la familia a asaltar para obtener el dinero necesario.
·         Impulso de los amigos o personas que te rodean.
·         La imitación de actos y actitudes de personas, que estos jóvenes admiran, que muchas veces son infames. 
·         Problemas de independencia en la familia.
·         Estructura social. Toca analizar también el tipo de época en la que los adolescentes vivimos y nos ha tocado nacer.


Sin embargo, muchas de estas conclusiones no respaldan los actos de estos “delincuentes juveniles” pues también es cierto que este tipo de actitudes se generan de generaciones en generaciones. ¿Y qué podríamos hacer, mejorar o cambiar para que estos adolescentes mejoren su tipo de vida?
La “delincuencia juvenil”  se infunde mediante el perfil delincuencial que tenemos en el país. La cual demuestra día a día que está llena de problemática social, niveles de miseria muy altos, agresiones sexuales y desintegración familiar (por medio de divorcios o simplemente separaciones). En este ámbito la “delincuencia juvenil” se ve dirigida o más bien orientada por la delincuencia de tipo mayor. Cuyos asaltos también se pueden divisar diariamente. 
Estadísticamente hablando las zonas de robo más registradas son las zonas urbanas pobres, pero eso no quita que en zonas residenciales también se presencien este tipo de actos. El gran problema es, que los centros policiales se aglomeran en un punto en particular en toda la ciudad, que suelen ser los más pobres, descuidando las zonas urbanas que es por dónde los delincuentes han empezado a infligir la faena.
Hoy en día es imposible caminar por la calle con algún objeto caro o simplemente de costo promedio. Hoy en día tampoco se puede tener un auto nuevo, valorizado en el más mínimo precio o salir en bicicleta. Tampoco hablar por teléfono, y lo deficiente de todo esto es que para algunos ciudadanos ya es algo lógico que no podamos hacerlo. Y si hoy en día pasa eso… ¿Qué podrá pasar en diez años más?  ¿Qué nos prohibiremos a nosotros mismos en un tiempo futuro? ¿Qué sucederá con estos “delincuentes juveniles” que seguirán apareciendo mediante el paso de los años? ¿Podemos hacer algo para mejorar la delincuencia?
Si pensamos abiertamente llegaremos a estas conclusiones:
·          Aumento de seguridad, tanto en zonas urbanas como en zonas urbanas pobres.
·         Orientación familiar.
·         Orientación educativa.
·         Apoyo para niños, adolescentes y jóvenes vulnerables a este tipo de actitudes.
·         La asistencia y compromiso con las víctimas de todo tipo de delincuencias.

Si podemos aplicar este tipo de preceptos tal vez en algunos años las cosas hayan progresado. De otra manera, la delincuencia podría tenderse a avanzar, y mucho más en personas y niños de menor edad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario